Las mujeres más bellas volvieron a adueñarse de la Red Carpet del evento que reúne extravagancia y brillo en el museo de Nueva York.

Después de un párate forzado a causa del COVID, que hizo saltar la edición del 2020, finalmente en la noche del último lunes 13 volvió la Met Gala, la noche más glamorosa del año de New York, organizada para juntar fondos a favor del Costume Institute del Metropolitano Museum of Art. Volvieron a prenderse los reflectores y a desfilar sobre la alfombra roja los nombres más prestigiosos del star sistem internacional. La ocasión oficial fue la abertura de la exposición “In America : a lexicón of Fashion”, la más importante exposición de moda del programa anual del Museo de fama mundial. Tres presidentes, el diseñador Tom Ford, el “Head “de Instagram , Adam Mosseri, y obvia

mente Anna Wintour by Oscar de la Renta , y cuatro anfitriones para presentar la velada , todos nuevos talentos “under 26” , el actor Timothee Chalamet, la cantante Billie Eilish, la poeta Amanda Gorman y la tenista Naomi Osaka, para una noche glamorosa que marcó la vuelta (esperemos definitiva) a la “grandeur” de los mega eventos que considerábamos como normales en época pre COVID, y que hoy en día tienen el sabor, la belleza y la excitación de lo extraordinario. Reglas férreas también en este caso: vacunas para todos, test anti COVID y barbijos Haute Couture. Para el resto , fue la misma , extravagante, imprevisible y brillante Gala del Met. El tema de la exposición , la historia de la moda americana y su evolución, pautó el “dress code” implícito de la velada e inspiró a las celebrities presentes sobre la red carpet en formas diferentes y a veces casi opuestas. Cada uno captó un aspecto de la cultura americana , desde el encanto de los años cincuenta al poder del denim , desde el country a lo sportwear, dando vida a un magma de sugestiones , mood e interpretaciones sorprendentes .

Total black extremo con silhouette esculturales, básicas , con una punta de dramatismo hacia el pasado , casi un estímulo a empezar de zero , para Sharon Stone by Thom Browne, Rihanna by Valentino y Kim Kardashian, con un look de pie a cabeza completamente negro firmado Balenciaga. Homenaje “efecto nostalgia” hacia la grande moda americana de los años cincuenta y sesenta para algunas invitadas súper chic: entre todas Billie Eilish que se alejó de su imagen punk y rebelde para mostrarse como una moderna Marylin Monroe color durazno y firmada Oscar de la Renta, y Emily Blunt que quiso homenajear a la icona Hedy Lamarr, actriz de los años de oro de Hollywood, con una creación de Miu Miu. La modelo Gigi Hadid lucio una melena rojo fuego y un vestido bustier con guantes, firmado Prada, que acordaba a Rita Hayworth, mientras Kaia Geber, la hija de Cindy Crawford, eligió homenajear a la icona de estilo Bianca Jagger, con un vestido de Óscar de la Renta que se inspiraba a una mítica prenda de los años Ochenta firmada por Halston.

Una de las inspiraciónes más presente de los look fue la bandera americana : muchas star se vistieron con sus colores, rojo, blanco y azul. Amanda Gorman, la poeta del asentamiento de Joe Biden, se presentó como una simbólica estatua de

la libertad color azul firmada por la diseñadora Vera Wang. Muchos vestidos rojos desfilaron sobre el red carpet del Met,desde Meghan Fox con una creación de Dundas a la francesa Isabelle Huppert en Balenciaga Couture.

Hubo quien eligió inspirarse en la cultura del profundo Sud, con un resultado menos glamoroso, mostrando botas tejanas y sombrero de cowboy: primera entre todas, Jennifer López enfundada en una creación de Ralph Lauren y acompañada por Ben Affleck. El efecto “nude look” siempre resulta impactante y de efecto asegurado en eventos importantes : para esta nueva edición de la Gala, la modelo Kendel Jenner seguramente fue la más audaz con un vestido trasparente cubierto solo de cristales que formaban un motivo de estrellas firmado por Givenchy Haute Couture. Otra paladina del nude look fue Zoé Kravitz que para el red carpet eligió una prenda de Saint Laurent compuesta solamente de una red metálica brillante. Tema o no tema, dress code o no dress code, el red carpet del Met es siempre un escenario privilegiado para locuras couture afuera de cualquier esquema y regla , una zona “franca” respeto al “lo que se hace y no se hace”en el cual hay quien se

divierte en sorprender con creaciones escenográficas grandiosas, que este año tampoco faltaron. La ex modelo Iman cautivó la atencion con una creación realmente fuera de los esquemas realizada por Dolce & Gabbana y Harrison Reed, compuesta por una falda en crinolina, un bustier atado con llamativas cintas, y un tocado de plumas de tamaño extra large. Las celebrities del espectáculo no fueron las únicas en haber dado lo mejor en la Gala del Met: el evento más fashion del año se ha hecho portavoz de declaraciones políticas y sociales de fuerte impacto a través de creaciones “ad Hoc”. Primera entre todas, la diputada Alexandria Ocasio-Cortez que para su primer Met Ball eligió lucir un vestido blanco realizado por Brother Vellies, firma que se focaliza en la sustentabilidad, con la escrita “Tax the rich” ( impuestos para los ricos ). También la diputada demócrata Carolyn B. Maloney impactó sobre la alfombra roja con un mensaje político social luciendo un vestido adornado con la escrita “igualdad de derechos para las mujeres”, en relación a un enmendamiento que garantizaría la igualdad legal de género entre mujeres y hombres que está en discusión desde 1979.