OLIVOS PARA EL MUNDO

El

primero de los proyectos que Ignacio Noel compró para transformarlo y volver a hacerlo rentable fue Sierras de Mazán. Son 1.000 hectáreas de olivos al pie del cordón montañoso de Chilecito, en la provincia de La Rioja. Su dueño original era Samuel Liberman, que había vendido la cableoperadora VCC e inició ese emprendimiento de olivos en la provincia del entonces presidente Carlos Menem. “Él se estaba yendo a vivir a Panamá y el negocio no iba bien. Nos juntamos y le dije que no quería negociar el precio y hacer el típico tironeo. Entonces, decidimos que yo me quedaba con la empresa y él se llevaba un porcentaje de las ganancias durante los tres primeros años. Rápidamente la compañía empezó a ser rentable de nuevo”, recuerda Noel. Hoy, desde Sierras de Mazán se hacen productos para Morixe como aceitunas y aceite de oliva, entre otros.