LA DURA PRUEBA DE LA PANDEMIA

Luego de un año, 2020, en el que la pandemia nos obligó a saltear el evento de los Premios Fortuna a las Mejores y Mayores Empresas del País, el martes 14 de diciembre esta revista volvió a entregar esos galardones, que son adjudicados en base al análisis de los balances públicos de las compañías que desarrollan actividades en la Argentina, en toda la Argentina.

El análisis de los números de las empresas al 30 de junio de este año fue realizado por la consultora Gabriel Rubinstein & Asociados, y la metodología se explica en esta edición bajo el título Cómo se hizo.

Participan todas las empresas que cotizan en la Bolsa y las que nos envían sus balances, o bien los datos que la consultora analiza.

La pandemia fue cruel con la actividad económica en general y con varios sectores en especial, que tuvieron que cerrar sus puertas o que, si bien pudieron continuar con la producción, no podían venderla por la caída vertical de la demanda.

Por ese motivo, algunos rubros no fueron incluidos este año.

La empresa ganadora en cada rubro es retribuida con una estatuilla de la diosa Fortuna bañada en bronce, obra del artista Raúl

Cano, y la mejor de todos los rubros, con el Premio Fortuna a la Mejor Empresa del Año, que está revestida en oro.

También se entrega el Fortuna de Plata, que premia a la Mayor Empresa. Para eso, se toman las veinte empresas que más facturan y se comparan las cifras de cada una de ellas con sus números de los dos años anteriores; aquella compañía que registra la mayor variación porcentual es la ganadora.

Por otro lado, fueron muchas las empresas de un cierto porte que debieron dejar de lados sus objetivos de facturación y rentabilidad para invertir recursos de todo tipo en el mantenimiento de toda su plantilla de personal y en la ayuda concreta a sus proveedores e incluso a sus clientes, así como a las comunidades donde desarrollan sus actividades.

Por eso, este año la revista Fortuna distinguió a empresas y fundaciones que se destacaron en acciones que apuntaron sencillamente a ayudar al otro.

Como ya es tradicional, hubo otros dos premios cualitativos: al Empresario del Año y a la Trayectoria Empresaria.

Estos premios fueron establecidos por el fundador de esta revista, el periodista y editor Jorge Fontevecchia, cuando apenas salíamos de la gran crisis de hace veinte años, como una manera de estimular a las empresas que invierten, crean riqueza y trabajo, y contribuyen al progreso de la Argentina y de sus ciudadanos.

Aquel propósito original nunca estuvo tan presente como en la vuelta de los Premios Fortuna luego de la pandemia.