Vinos con prestigio global

Fundada por Nicolás Catena hace más de un siglo en Mendoza, está enfocada en los vinos de alta gama con prestigio internacional. Su interés por la modernización constante y el valor de la tradición.

Malbec, Chardonnay, Cabernet Sauvignon, Syrah, Tempranillo. El gusto está en la variedad, y se alimenta de la tradición, la modernización constante y las incesantes ansias de crecimiento.

Bodegas Esmeralda acaba de consagrarse ganadora del Premio Fortuna 2021 en la categoría Bebidas. Su CEO, Gastón Pérez Izquierdo, recogió la estatuilla que lo acredita, que le fue entregada por el secretario de Comunicación y Prensa de la Presidencia, Juan Ross.

La bodega fue fundada hace más de un siglo por Nicola Catena luego de desembarcar en la Argentina, proveniente de Italia.

Él estaba convencido de que había encontrado la tierra prometida en Mendoza, a los pies de la Cordillera de Los Andres, donde plantó su primera viña de Malbec en 1902.

Hasta entonces, esta cepa sólo había sido plantada en los vinos de corte de Burdeos. Fue un revolucionario. Su hijo Domingo heredó este sueño y condujo la bodega familiar a un segundo nivel, convirtiéndose en uno de los viticultores más prósperos de la provincia.

La compañía debe su nombre actual al matrimonio entre Domingo y Angélica Zapata.

Durante los últimos 20 años fue la tercera generación, con Nicola y Laura Catena, la que expandió el negocio en el país y fronteras afue

ra. Hoy en día la bodega despliega su producción de vinos en una amplia paleta de colores y sabores.

De sus cuidados varietales, cobijados por las características singulares del clima andino, surge un producto que impera en las más distinguidas mesas y catas internacionales.

Gracias a una tecnología de punta y un espacio dedicado a la experimentación e investigación –el Catena Institute of Wine- la bodega comercializa cinco marcas en la Argentina: Catena Zapata, Angélica Zapata, D.V. Catena, Saint Felicien y Nicasia Vineyards.

En el exterior el foco está en la calidad y exporta siempre bajo su nombre, tres marcas: Catena Zapata, Catena Alta y Catena.

La compañía enfatiza la tecnología de punta y la experimentación e investigación a traves de un instituto especializado en el vino.

Los avances tecnológicos que colaboran en el desarrollo de sus productos incluyen modernos tanques de acero inoxidable, prensas neumáticas y nuevas moledoras y sistemas de bombeo.

Además, lleva adelante un ambicioso programa de almacenamiento en barriles de roble que ha ido adquiriendo año a año a las más prestigiosas tonelerías de Francia y Estados Unidos.

Bodegas Esmeralda en sí cuenta con un establecimiento central y cuatro bodegas satélite en las cuales se elaboran los diferentes cortes. Todos los vinos de estas bodegas anexas se trasladan hacia Junín para ser fraccionados y despachados, lo que implica un complejo trabajo de coordinación y logística.

El enólogo al frente de la bodega es Leopoldo Kuschnaroff, ingeniero agrónomo, hijo de viñateros, formado en Mendoza y perfeccionado en los Estados Unidos. Realizó elaboraciones en ese país para poner a prueba sus conocimientos y al regresar a la Argentina trabajó en el manejo de viñedos por algunos años.