Las verbenas

Se trata de una de las plantas más populares en el mundo, ya que son muy adaptables y tienen propiedades medicinales. Además, son muy buscadas por su valor ornamental

FLORES

La mayoría de las verbenas son plantas rastreras bajas que no superan los 25 cm de altura. Muestran hojas opuestas entre sí, y dan unas bonitas y llamativas flores que habitualmente son de tonos violetas o morados, pero que pueden ser de muy diversos colores como blanco, rojo, rosa, etc.

Recomendaciones

Clima: templado o cálido. Esta planta florece en los meses de verano, y lo hace más y mejor cuando se encuentra en una zona de temperaturas altas. Lo que difícilmente tolera, en cambio, es el clima muy frío. Las heladas tienen muchas probabilidades de acabar con la verbena, y las temperaturas bajas, con vientos fuertes, también pueden hacerle bastante daño.

Luz y ubicación: necesita mucha luz solar pero no la incidencia directa del sol fuerte del mediodía.

Lo mejor es ubicarla en semisombra si está en un clima de temperaturas muy altas y al sol si el clima es cálido o un poco frío.

En interior, ponerla en alguna habitación muy bien iluminada pero un poco alejada de la ventana. En exteriores, buscarle una zona donde reciba luz pero esté cubiertas de las horas de mayor influencia, es decir, las de mediodía.

Sustrato: debe ser ligero y con un buen drenaje. La verbena no tolera los excesos de humedad en sus raíces, por lo que es esencial un suelo arenoso que proporcione un drenaje adecuado.

Riego: es mejor hacerlo cuando hace dos días que se vea la tierra seca. Nunca regar hasta encharcar y, si se tiene la verbena en maceta, asegurarse de que el recipiente cuenta con agujeros de drenaje y de retirar el agua sobrante del plato de debajo de la maceta luego del riego.

Poda: La verbena agradece recibir una poda de hasta tres veces al año. La primera se realiza en primavera, que es cuando salen las primeras flores, y se las debe podar a todas. Hacer esto sin miedo, ya que se hace para estimular la floración de la planta y no tardarán en salir más.

Otra poda hay que hacérsela en verano.

También necesitará la poda de otoño. Se puede utilizar los tallos podados como esquejes, que echarán raíces sin demasiados problemas, o para hacer centros de mesa o decoraciones.