Pautas para superarlo

Cuando una persona adulta no puede establecer relaciones afectivas amorosas con cierta estabilidad, ya sea a mediano o largo plazo, necesita ayuda profesional. La persona debe trabajar con el terapeuta en el fortalecimiento del principio de realidad.

Para el psicólogo, también es importante analizar, desde lo afectivo, cuál es la necesidad de la persona y de dónde viene. El querer amar, ser amados o protegidos, puede derivar de sus historias y relaciones familiares. Se debe ubicar al individuo en sus necesidades conscientes e inconscientes que vienen desde la historia familiar, su relación con el papá, la mamá, los hermanos, los lazos afectivos, las emociones que le ofrecieron al ser cuidado, la protección, o al contrario, la devaluación, desapego o agresión. Conociendo mejor su historia, la persona separará los elementos para descubrir cuál es su verdadero deseo y así podrá resolverlo.