Plan de retiro voluntario

Estrellas que se jubilan en el umbral de una nueva era. Un golpe para toda la industria.

Brad Pitt ganó un Oscar en 2020 por su actuación en "Once Upon a Time in Hollywood" de Quentin Tarantino, está al frente de una importante productora, y tiene por delante el estreno de "Bullet Train" de Sony. Sin embargo, el actor de 58 años no está preparándose para un resurgimiento tardío. Todo lo contrario: adelantó que su carrera cinematográfica está llegando a su fin. “Estoy en mi último tramo, quizás este sea mi último semestre”, sentenció

Pitt, que a fin de año estrenará "Babylon", que se centra en figuras de la industria que se adaptaron a la transición del cine mudo al sonoro, y llega justo para clasificar a los Oscar de la mano del director de "La La Land", Damien Chazelle.

Pitt marcó que seguirá vinculado a la industria como producto y quizás en algún momento como director, a través de su productora Plan B, que tiene por delante los estrenos de "Blonde", con Ana de Armas como Marilyn Monroe; y "Women Talking", protagonizada por Rooney Mara y Frances McDormand, dos mujeres menonitas que se unen contra sus violadores. En sintonía con el recambio no solo tecnológico, pero también discursivo, que atraviesa Hollywood.

RETIROS. “Cuando la carrera de Pitt llegue a su fin real, la industria perderá a una de las últimas estrellas de cine que quedan en la pantalla grande", opinó Quentin Tarantino, quien lo dirigió en “Bastardos sin gloria” y “Érase una vez en Hollywood”. “Es una raza diferente. Tiene el brillo de

las estrellas de antes. Cuando lo vi por primera vez a través del visor de la cámara sentí como si estuviera viendo una película terminada”, agregó Tarantino, otro que también coquetea con la jubilación tras sobrevivir a la cancelación por su vínculo con Harvey Weinstein (fue productor de todos sus films hasta 2015).

"La mayoría de los directores tienen unas últimas películas horribles. Ese es el caso de la mayoría de los directores de la Edad de Oro. Y terminó siendo el caso de la mayoría de los directores del New Hollywood que hicieron sus últimas películas a finales de los '80 y principios de los '90. Yo quiero retirarme antes de ser obsoleto”, remarcó el director de “Pulp Fiction” en medio de una ola de anticipadas jubilaciones en Hollywood.

Algunas de estas celebridades se decidieron tras una tanda de roles y películas de segunda. Otras argumentaron la necesidad de un descanso por motivos de salud. Ambos casos aplican a Bruce Willis, que anunció su retiro hace unos meses. A la estrella de “Duro de Matar”, uno de los actores más prolíficos de los 90, se le diagnosticó afasia, que afecta sus habilidades cognitivas.

En tanto, Jim Carrey, anunció recientemente que había terminado con Hollywood porque deseaba pasar la página (también mbién hubo rumores de enfermedad). ). “Realmente me gusta mi vida tranquila ranquila y poner pintura sobre bre un lienzo. Amo mi vida da espiritual y siento que, e, y esto es algo que quizás uizás nunca escuches decir a otra celebridad, pero tengo suficiente. He hecho suficiente. Yo o soy suficiente", marcó arcó el protagonista a de “The Truman an

Show”.

REPAROS. Pero Carrey dejó una puerta abierta: “Si Los Ángeles trae algún tipo de guion escrito con tinta dorada que me diga que va a ser muy importante que la gente lo vea, lo haría, pero me estoy tomando un descanso” concluyó el actor de “La Máscara”.

Cameron Diaz, su compañera en esa cinta y estrella de una decena de films durante los años '90 y 2000, decidió abandonar su carrera en 2018: “No estoy promocionando ninguna película y no tengo que darle nada a nadie. No voy a hacerlo más, voy a vivir mi vida", se despidió.

Un descanso indefinido al que se suma Sandra Bullock, quien puso todo en pausa tras el estreno sin éxito “The Lost City” este año. La actriz reveló durante su última gira promocional que quería dedicarse “24/7 a los bebés y mi familia”, en referencia a sus hijos, Louis de 11 años y su hija Laila de 8 años.

Pero más allá de las excusas familiares, la jubilación en Hollywood incluye a actores y actrices que no son padres, como Emma Watson, que lleva años sin filmar y solo regresó para el especial por los 20 años de “Harry Potter y la piedra filosofal”, donde interpretó a Hermione Granger.

Watson siguió así el camino de otras estrellas juveniles como MaryKate y Ashley Olsen, las gemelas Disney que tomaron la decisión de conjunta de dejar Hollywood para p ingresar al mundo de la moda (su (s hermana Elizabeth Olsen es una de las estrellas del Universo Marvel Marvel).

Consultado sobre la hégira, el actor y director Kevin Costner apuntó: “algunos eligen esta profesión porque quieren ser populares, y lo abandonan cuando ya no lo son. Pero otros eligieron ser relevantes. Creo que eso es lo que tenemos que hacer. No podemos simplemente descartar nuestro trabajo porque es menos popular”.

ENROQUES. Hollywood está cambiando, no hay duda. Y eso impulsa los adioses. Pero las cabezas de la industria siguen siendo las mismas, reforzando la idea de volver a las bases. Y la reorganización, como sucedió en Warner Bros. Pictures, donde Michael De Luca llegó la cima, son meros enroques: el y Pamela Abdy, su socia, manejaron MGM, y New Line Cinema al cual regresan hoy.

Más ejemplos: Tom Rothman, quien una vez presidió Fox Entertainment, está al frente de Sony Pictures; su copresidente, Jim Gianopulos, dirigió Paramount Pictures hasta que fue reemplazado por Brian Robbins de Nickelodeon; y el jefe de Prime Video de Amazon, Mike Hopkins, está considerando a Emma Watts, ex ejecutiva de cine de Fox y Paramount, para el liderazgo de MGM.

The New York Times lo describió como un "juego de larga data de reorganizar sillas en el Titanic". El mismo análisis explica que los jóvenes aspirantes a directores de estudios prefieren liderar empresas tecnológicas en lugar de ingresar a una industria que está en un declive controlado y sin empuje para desarrollar nuevos talentos. Por otro lado, los inversionistas prefieren una "mano firme y experimentada" para dirigir el barco. Y eso sucede en Marvel, Pixar, Disney Animation, Lucasfilm y Fox.

Además, los jefes de estudio tienden a no renunciar nunca a diferencia de los actores: a pesar de la corporativización total de los estudios, todavía son puestos con glamour.

Es un negocio de clubes, donde

La mayoría de los directores tienen unas úlúltimas películas horribles. Yo qquiero retirarme antes de ser obsoleto”.

las decisiones se toman en función de las relaciones establecidas. Y la decisión hoy es acotar y renovar la nómina de talentos para rejuvenecer sin cambiar demasiado.

RECORTES. El negocio del cine atraviesa tiempos de cambio, y solo habrá de quedarse con lo que funciona.

Pero no necesariamente serán todas caras nuevas: Tom Cruise, de 59 años, sigue siendo la estrella de cine más grande del mundo. Posiblemente más grande que nunca: a “Top Gun Maverick” podría seguirle su inclusión en el Universo Marvel para revivir a Iron Man.

Grandes nombres y mega franquicias. La máxima que siempre generó dividendos en la industria del cine y la televisión, y que hoy se impone también en el ondemand tras el crash de Netflix: la empresa de Reed Hastings tuvo un primer mal trimestre en 2022. Perdió más de 200.000 suscriptores y reconoció que competidores más nuevos como Disney Plus y HBO Max estaban poniendo fin a la forma en que la compañía había estado haciendo negocios durante casi una década.

Netflix se alejará, según un informe de The Hollywood Reporter, del ritmo frenético de lanzamientos y las películas medianas, para abrazar un nuevo plan de "películas más grandes" a un "ritmo menos glotón".

Se suponía que Netflix transformaría a Hollywood. En cambio, acaba recurriendo a las mismas prácticas que hicieron gigantes a sus competidores: Disney y Warner demostraron en paralelo que hay retornos más grandes y consistentes en grandes éxitos de taquilla, generalmente involucrando algún tipo de superhéroe o un actor que interpreta a un superhéroe en otra franquicia.

En respuesta a Wall Street, Netflix ha tomado medidas de reducción de costos (recortó el 2 por ciento de su fuerza laboral) y liquidó la división de películas de acción, familiares e independientes con un presupuesto de menos de $ 30 millones: las que daban trabajo a muchas estrellas de Hollywood venidas a menos; el recorte que apura jubilaciones.

Sin embargo, la plataforma aclaró que no achicará su producción en Hollywood, pero por el contrario duplicará las películas con base en Los Ángeles, filmando al menos 70 títulos en 2023 con un gasto de 18 mil millones de dólares.

“Apuntamos a proyectos como Don't Look Up y Red Notice y Adam Project", explicó el CEO de Netflix, Ted Sarandos. Títulos colmados de nombres hollywoodenses y con presupuestos de 50 a 200 millones, como el próximo thriller de Emily Blunt, “Pain Hustlers”; o “Grey Man”, protagonizada por Ryan Gosling y Chris Evans. Léase: estrellas todavía vigentes. “La tendencia a hacer cualquier cosa para atraer talento y darles carta blanca está desapareciendo. Por eso hay actores y actrices que se jubilan. Pero ese camino solo conducía al ocaso. la industria quiere volver a sus bases, y ya no habrá plata fácil. Pero la recompensa puede ser mayor", sintetiza The Hollywood Reporter.