Más casos de Covid-19: se triplicaron en el último mes. También aumentan en otros países. Caída en la tasa de

Se triplicaron en el último mes. También aumentan en otros países. Caída en la tasa de vacunación y falta de prevención.

Ypese a los deseos de que la pandemia de Covid-19 quedara en el olvido así, con el chasquido de dos dedos, en diversos países se está detectando un aumento en la cantidad de contagios de la enfermedad causada por el coronavirus SARS-CoV-2. La gravedad de la inmensa mayoría de los casos disminuyó drásticamente gracias a las vacunaciones masivas, pero la cantidad de enfermos vuelve a aumentar, y en realidad no se sabe con exactitud en qué proporción, porque los países han cambiado sus sistemas de detección y las normas que determinan cuándo se debe testear.

Diferente es el caso de China, país que decidió desde los inicios de la pandemia, allá por enero del año 2020, por la estrategia de Covid Cero. Y que por eso mismo, cuando se detectan pequeñísimos brotes, incluso de menos de una decena, se cierran fábricas enteras, empresas, barrios, y hasta ciudades, que vuelven a entrar en cuarentena sin posibilidad de circulación para la población y testeos obligatorios a todos los habitantes.

Esta estrategia, que en un momento le permitió a China controlar la propagación de la pandemia y limitar enormemente la cantidad de personas fallecidas, está en el origen de las protestas que se registran

en el gigante asiático. La población tiene sus razones, cuarentenas que van y vienen según la cantidad de contagios. En la última semana de noviembre, y después de que las autoridades chinas relajaran algunas medidas, el número de infecciones confirmadas alcanzó un nuevo récord de 40.052 casos, con 36.304 que aún no mostraban síntomas.

De todas formas, China tendrá grandes dificultades para mantener su política de Covid Cero con Ómicron en el aire. Acaba de anunciar que reforzará la vacunación entre los adultos mayores, con lo cual podría llegar a aliviar algunas de las restricciones pronto.

En los Estados Unidos, con una vida casi similar a la de la pre pandemia, y aún cuando los fallecimientos diarios están muy lejos de los dos mil que se producían en plena ola causada por la variante Ómicron a principios de año, se ubican de todos modos en los 300 promedio, de acuerdo con datos de los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades (CDC). Esta cifra es entre dos y tres veces más alta que la de los fallecimientos causados por la influenza. Y, un dato importante: casi 9 de cada diez ocurren entre personas adultas mayores de 65 años, cuyas tasas de vacunación en cuento a refuerzos tras las dos dosis básicas del esquema anticovid, siguen bajando.

Mientras tanto, entre la población de más de 65 años la Covid-19 es la tercera causa de muerte, después de los cánceres y los accidentes de tránsito.

La agencia nacional de salud del Reino Unido (la NHS) reforzó sus campañas de vacunación impulsando aquellas referidas a la necesidad de que la población se coloque los refuerzos necesarios, tras las dos primeras dosis básicas que la mayoría de las vacunas anticovid incluyen. “Es que la protección de las vacunas contra la Covid-19 se desvanece con el tiempo”, se explica en los flyers de la campaña.

ARGENTINA. Hace cuatro semanas que los casos de Covid-19 informados vienen aumentando de manera sostenida en el país. Hay que tener en cuenta que el testeo y la notificación se priorizan solo en ciertas circunstancias, como ser mayor de 50 años y tener comorbilidades, trabajar en instituciones de salud o en comunidades cerradas, haber viajado a lugares con variantes de Covid que sean de preocupación y no estén circulando en la Argentina dos semanas antes de los síntomas, estar internado por una enfermedad grave. De manera que la cantidad real de contagios es, probablemente, mucho más elevada que la descripta en los informes oficiales, tanto a nivel nacional como en los diferentes distritos del país.

Lo resume el físico y ex Decano de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA, Jorge Aliaga, que analiza los datos de la pandemia desde los inicios de la misma: “Es imposible comparar lo que sucede actualmente con los casos de hace un año porque desde marzo no se testea a menores de 50 años que no sean de riesgo. Y esas personas son las que más se contagian. Pero se puede comparar con los casos de hace un mes. Casi se triplicaron a nivel país, y se multiplicaron por 7 en la Ciudad de Buenos Aires”. Y agrega: “CABA pasó de 30 casos por día de promedio a 220. No son muchos, pero no se puede saber cuantos no se detectan en jóvenes. Lo más probable es que los casos sigan aumentando hacia las fiestas de fin de año y que luego disminuyan en el verano, como ha sucedido en años anteriores”.

Por su parte, la infectóloga Leda Guzzi advierte que “es un contexto para mirar con mucha atención porque estamos en un contexto regional de aumento de casos, nosotros también estamos en pleno crecimiento de casos en un contexto de bajo testeo, por lo cual es relevante esta suba, aún cuando todavía sean números bajos. Es muy probable que esto sea solo la punta del iceberg y que estemos en presencia del inicio de una nueva ola”.

La vacunación, estrategia a la que apostaron las autoridades sanitarias argentinas se estancó, y apenas un

ES IMPOSIBLE COMPARAR LOS CASOS ACTUALES CON LOS DE HACE UN AÑO PORQUE CAMBIÓ LA POLÍTICA DE TESTEO.

47,5% de la población recibió el primer refuerzo de la vacuna anticovid, de acuerdo con el último Boletín Epidemiológico Nacional, que describe la situación hasta mediados de noviembre pasado.

“En cuanto a los grupos de edad se observa que el 59% de la población de 18 y más años recibió el primer refuerzo mientras que en el grupo de 50 y más años la cobertura es del 71,9% -puntualiza el documento-. Con respecto a los niños, niñas y adolescentes, en el grupo entre 12 y 17 años la cobertura alcanzó el 37,3%, en el grupo de 5 a 11 años la cobertura es del 12,7% y en el grupo de 3 a 4 años la cobertura es del 2,4%.”

PREVENCIÓN. La conclusión es que, pasados las grandes olas del 2021, cuando fue introducida la vacunación, la población fue disminuyendo su concurrencia a los vacunatorios, sobre todo en la franja etaria menor de 40 años. Y esto es un problema que se observa no solo en la Argentina. Un problema, porque el virus continúa mutando y aunque la variante Ómicron sigue siendo la predominante en el mundo entero, han surgido sublinajes que pueden provocar variaciones en cuando a la intensidad de los síntomas, al escape inmunológico, y a la necesidad de continuar con los refuerzos en las vacunas.

De hecho, y según el virólogo Humberto Debat, la expansión de algunos de esos sublinajes que están ganando presencia, está siendo acompañada por un aumento de casos tanto en los Estados Unidos como en Europa.

“Hace poco hubo una detección de

LOS EXPERTOS ENFATIZAN LA NECESIDAD DE DARSE LAS VACUNAS DE REFUERZO Y VENTILAR ESPACIOS CERRADOS.

un nuevo sublinaje, siempre dentro de Ómicron, denominado BE.9 en la región del Amazonas, que es importante porque es un lugar que está cronológicamente adelantado a nivel epidemiológico y regional. Se detectó un aumento de infecciones registradas en esa región pero aún no tenemos datos epidemiológicos claros ni biológicos sobre sus particularidades”, describe.

A todo esto también se suma que las medidas de cuidado (las no farmacológicas, como el uso de barbijo en ambientes cerrados y públicos, el distanciamiento social, la ventilación de esos espacios) se relajaron al mínimo o han casi desaparecido. El calor, el encierro en lugares con aires acondicionados que no ventilan, contribuyen a los contagios. “Lamentablemente la mayoría de la gente no ha tomado conciencia de cuál es el escenario de riesgo, que si uno se encierra con muchas otras personas hay peligro de contagiarse. Uno no va a pedir agua potable solo cuando hay epidemia de cólera, la diferencia es que tomamos agua varias por día, pero respiramos diez veces por minuto y respiramos el aire que exhalan los demás cada vez con más contaminantes de todo tipo y nos vamos a terminar enfermando de lo que tengan todos. Así de simple”, resume Aliaga.

“Es muy relevante que las personas tengan en cuenta que tienen que darse los refuerzos que les correspondan de las vacunas contra Covid -enfatiza Guzzi-. Después del cuarto mes hay que acceder a un segundo refuerzo y en el caso de las personas con más de 50 años y personas con factores de riesgo tienen que aplicarse un refuerzo extra, es decir, un tercero, a los cuatro meses del anterior”. Para la infectóloga es muy importante que quienes tienen factores de riesgo utilicen barbijo en lugares cerrados. “Pero de consolidarse y cristalizarse una nueva ola tal vez todos deberíamos volver a usar barbijos en espacios cerrados y volver a poner en práctica la ventilación cruzada y constante y el auto aislamiento ante síntomas respiratorios para no exponer al resto de las personas”.