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Un mundo de innovaciones

Los camiones pesados y los ómnibus modernos tienen muchas sorpresas técnicas. Están destinadas a aumentar el rendimiento y reducir el consumo de gasoil, y hasta eliminar las emisiones en los modelos electrificados.

Por Pablo Jorge Gualtieri

Ahora las elecciones de un automotor pesado son múltiples. Las unidades Diesel, por ejemplo, que seguirán siendo numerosas por varias décadas más, tienen que adaptarse a las nuevas regulaciones gubernamentales en lo que concierne a emisiones contaminantes y disminución del consumo. Así, veremos motores Diesel cada vez más equipados con controles electrónicos y sistemas de sobrealimentación por turbo que también sirven para recuperar parte del calor de los gases de escape. Los ventiladores del motor serán exclusivamente automáticos, del tipo eléctrico o hidráulico, y operarán de acuerdo con los requisitos de la máquina. Es decir que, cuando se arranca en frío, por ejemplo, no girarán para ahorrar potencia. Y lo harán a su máximo régimen cuando el motor tienda a sobrecalentarse en condiciones difíciles de trabajo a altas temperaturas.

Los sistemas de enfria

miento seguirán siendo por líquido, pero desaparecerá el termostato convencional, que será reemplazado por una válvula de control por microprocesador, mucho más exacta.

Propulsiones alternativas

Hemos dicho que los Diesel no tendrán mucha competencia en lo inmediato, pero ya están apareciendo camiones y ómnibus enteramente eléctricos, como punta de lanza de un futuro que ya se avisora. La propulsión eléctrica tiene que recurrir a motores eléctricos para las ruedas y conjuntos de baterías de litio o células de combustible alimentadas por hidrógeno. En definitiva, todos los vehículos serán eléctricos porque las células de combustible que se recargan con hidrógeno producen electricidad para alimentar a los motores de tracción.

La diferencia está en que se recarga hidrógeno gaseoso a alta presión. En el caso de las baterías se recargan de electricidad en estaciones especiales. Las de hidrógeno también. Las emisiones en ambos casos son nulas, para beneficio del medio ambiente. Se llegará a la propulsión cero, pero tendremos que esperar a que se solucionen muchos problemas de producción de electricidad, de hidrógeno y de infraestructura.

Rápidas atención y verificación

En este tipo de unidades, el control de los diferentes componentes y la verificación de posibles fallas son vitales. Las tareas se verán ayudadas por las herramientas electrónicas, como los escáneres y otros dispositivos más avanzados.

El conductor o el técnico deben llegar fácilmente a los puntos para inspeccionar. Para lograrlo, los fabricantes han trabajado mucho en el diseño y construcción de componentes modulares como los filtros de aceite y de aire en los Diesel, y en los conjuntos de faros con luces led o lámparas de descarga (en retirada). Todo camión u ómnibus contará con toda la iluminación led, ahorrando un alto porcentaje de energía eléctrica.

El aceite para motor es cada vez menos viscoso (para disminuir la fricción), y se utilizarán materiales compuestos de fibras de carbono en muchas partes, como el cárter de aceite, la tapa de válvulas y hasta en los pistones. Además, una cantidad importante de sensores electrónicos se encargará de mantener en alerta al conductor.

NUEVAS TECNOLOGIAS / CAMIONES

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2021-07-15T07:00:00.0000000Z

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