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Lo que dejó la revolución sandinista lleva a preguntarse: ¿para qué sirvió?

Haití. Haití fue el primer país latinoamericano que se independizó en 1804, y también el más pobre. A diferencia de su vecina Cuba, que fue un país próspero al que los europeos venían a “hacer la América” hasta 1930, Haití fue siempre paupérrimo, sin instituciones, azotado por desastres naturales, golpes militares y tiranos irracionales. Tiene el triste récord de ser el único país de América en el que nadie está vacunado contra el covid porque el gobierno ha rechazado todas las donaciones de vacunas que se le han hecho.

En 1957 asumió el poder François Duvalier, más conocido como Papa Doc, que tras trece años en el poder nombró sucesor a su hijo, Jean-Claude, conocido como Baby Doc. El médico, inicialmente católico y miembro del Partido Comunista, se sumergió progresivamente en el vudú, una religión africana extendida en los sectores populares negros.

Duvalier fomentó la lucha de los negros con los mulatos, a los que acusó de ser oligarcas; para ser más popular se convirtió en

(sacerdote vudú). Esto no impidió que pactara con la Iglesia Católica firmando un concordato por el que el Vaticano le concedió la potestad de nombrar obispos y párrocos de su país.

La prioridad de su gobierno fue la lucha contra la delincuencia. Creó una policía propia conocida como los “tonton macoutes”, integrada por delincuentes disciplinados, fieles a su líder. Imbuidas de las creencias del vudú, estas milicias estaban convencidas de que cumplían una misión superior y de que contaban con el apoyo de los insectos del país, que también obedecían a Duvalier.

Papa Doc resolvió que lo suceda su hijo Jean-Claude. Resultó ser un joven bastante bobo, sin ninguna instrucción, más interesado en los coches deportivos que en la política. Después de 15 años de gobernar Haití en medio de escándalos, Baby Doc tuvo que dimitir. Varios países le negaron el asilo, y finalmente se instaló en un elegante apartamento en la Costa Azul.

Según parece se llevó 1.200 millones de dólares, buena parte de estos en ataúdes que llevó al exilio. En pocos años gastó todo y se lo vio mendigando en el metro de París. Duvalier impuso una Constitución que está vigente.

La semana pasada el presidente Jovenel Moïse fue asesinado en su residencia.

El personaje se había autoprorrogado el período presidencial por un año y pretendía eternizarse en el poder. En los últimos meses gobernó por decreto, tras suspender a toda la Cámara de Diputados, a los dos tercios del Senado que no le obedecían y a todos los alcaldes del país. Mientras tanto, el hambre, la pobreza y los cortes de luz diarios siguieron hundiendo a Haití en el caos.

Aunque los autores materiales del asesinato fueron colombianos, está claro que fue mentalizado por seguidores del vudú. Además de los numerosos impactos de bala que Jovenel tenía en el cuerpo, le habían extirpado los ojos. Es la forma en que los asesinos creyentes del vudú impiden que la víctima los persiga.

Política / Ideas

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2021-07-25T07:00:00.0000000Z

2021-07-25T07:00:00.0000000Z

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