Kiosco Perfil

Las encuestas dicen que las encuestas fallan

RODRIGO LLORET*

que daba a Landon como ganador. El venía anticipando elecciones desde hacía dos décadas y para 1936 había enviado cartas con preguntas a sus suscriptores, que eran diez millones, lo que equivalía a un cuarto del padrón de entonces. El resultado: Landon obtendría el 56%.

Gallup no tenía inversión por lo encuestó solo a cinco mil personas. Pero introdujo modificaciones: a diferencia del que recibió respuestas de lectores de medio y alto nivel socieconómico, abrió su muestra a una mayor representación. Eran tiempos de gran desempleo, por lo que no solo realizó preguntas a personas adineradas, sino también a desempleados. Gallup anticipó que Roosevelt ganaría por el 62%. Y el demócrata logró su reelección.

Las innovaciones de Gallup crearon un momento de esplendor en la sociología del siglo veinte. Pero en la actualidad, los sondeos han perdido su capacidad de anticipación. La elección de Donald Trump en Estados Unidos, o el triunfo del Brexit en Gran Bretaña, son los dos puntos más altos de ese error.

El ocaso de las encuestas también llegó a la Argentina: fallaron en la presidencial de 2019 y en las últimas PASO. En ambos casos causaron impacto porque habían anticipado un resultado inverso al real.

¿Por qué seducen tanto las encuestas si son tan poco eficaces? ¿Por qué deparan tanta atención si han errado tanto? Quizás porque el futuro es impredecible y obtener información de lo que vendrá es reconfortante. No importa si las encuestas tienen tanta rigurosidad científica como la astrología: permiten calmar ansiedad. Y eso tranquiliza a un electorado agrietado.

En

el politólogo Ernesto Calvo recuerda que el error total de las encuestas es considerablemente mayor al error muestral que es reportado por los encuestadores. El profesor de la Universidad de Maryland explica que en tiempos de polarización en los cuales el margen de victoria es menor al error total, los votantes forman expectativas poco realistas de lo que es posible anticipar.

Doce años más tarde de su logro, Gallup tuvo un rotundo fracaso cuando predijo que Thomas Dewey derrotaría a Harry Truman. Truman fue presidente en 1948 pero la empresa que fundó Gallup se convirtió en una de las mayores consultoras mundiales de opinión pública y todavía sigue haciendo encuestas.

Como las que se publicarán hasta el 14 de noviembre en Argentina. Si se equivocan tendrán otra oportunidad.

IDEAS

es-ar

2021-09-19T07:00:00.0000000Z

2021-09-19T07:00:00.0000000Z

https://kioscoperfil.pressreader.com/article/282716230133043

Editorial Perfil