Kiosco Perfil

Copa Conmebol. Al color lo puso San Pablo, pero al torneo se lo llevó Independiente del Valle.

HUGO CARIC

Independiente del Valle de Ecuador venció 2-0 a Sao Paulo y se quedó con la final cordobesa de la Conmebol. Los argentinos Lautaro Díaz y Lorenzo Faravelli marcaron los goles del equipo vencedor. Hubo 23.000 personas en

La plata no hace la felicidad y tampoco la compra hecha. A pesar del poderío económico que ostentan sus clubes, y de lo que marcan las estadísticas de los últimos años, la alegría no es solo brasileña en los torneos de la Conmebol. Lo comprobó en carne propia el Sao Paulo, que llegó a Córdoba con todo preparado para levantar su segunda Copa Sudamericana después de una década y armar su carnaval y terminó viendo cómo le dio la vuelta olímpica en la cara un humilde equipo ecuatoriano, Independiente del Valle, que repitió el logro de 2019 en Paraguay.

El festejo fue para el puñado de ecuatorianos que alentaron desde lo más alto de las plateas Ardiles y Gasparini. En la popular Artime estuvo la gran mayoría de los 15.000 paulistas que, animados por la buena campaña de su equipo y la floja performance de nuestro Ministerio de Economía, le pusieron color al Estadio Kempes y también a otros puntos de la ciudad en distintos eventos que se armaron durante los días previos. Se quedaron con las ganas de sumar otra pieza a su colección de títulos internacionales, que incluye tres el Mario Alberto Kempes, donde en las tribunas hubo predominio de simpatizantes brasileños. El elenco paulista ya había jugado dos partidos oficiales, ambos ante Talleres, y tampoco había podido ganar ni marcar goles.

Libertadores, dos Recopas, una Conmebol, dos Intercontinentales y un Mundial de Clubes.

“Ole, ole”, terminaron gritando los ecuatorianos para celebrar el triunfo del cuadro dirigido por el argentino Martín Anselmi. El entrenador de Independiente del Valle no fue el único compatriota en la final de un certamen por donde pasaron sin pena ni gloria Independiente, Racing, Banfield, Unión, Defensa y Justicia y Lanús. Los dos últimos, los finalistas de la edición 2020 que se dirimió en el Kempes sin público y con victoria para ‘el Halcón’. Hubo casi una formación completa de jugadores argentinos: Carabajal, Schunke, Pellerano, Faravelli, Lautaro Díaz y Bauman, por el lado de los ecuatorianos; Calleri, Galoppo y el cordobés Nahuel Bustos, en el bando brasileño. Apenas un consuelo.

Jogo efectivo. En los papeles, se esperaba que la diferencia que Sao Paulo hizo en las tribunas se trasladara al campo de juego. Nada que ver. Independiente del Valle se le plantó de igual a igual al elenco de Rogerio Ceni, mostrando buena circulación de pelota y metiendo presión en campo rival. Y sorprendió con una jugada rápida, un preciso toqueteo al que Díaz le puso el moño con un potente disparo, cuando apenas se habían jugado 13 minutos.

Sao Paulo acusó el impacto. Después de un momento de desconcierto, el Tricolor trató de reaccionar, copando el mediocampo y jugando más cerca del área adversaria, aunque se repitió con las subidas de Patrick por la izquierda y eso le quitó sorpresa. Tampoco tuvo jogo bonito, como para darle al ex-Boca Agustín Calleri la chance de coquetear más seguido con el gol.

En el complemento Sao Paulo tomó la iniciativa, pero Independiente del Valle lo aguantó bien y aprovechó al máximo un contragolpe, que Lorenzo Faravelli transformó en 2-0. El segundo tanto de los ecuatorianos, a los 21 minutos del complemento, prácticamente le puso el epílogo a la historia. Para el último segmento del encuentro quedaron los embates de los brasileños y el lucimiento de Ramírez, el arquero ecuatoriano.

Independiente del Valle fue un justo ganador y festejó en tierras cordobesas. Sao Paulo se quedó sin fiesta y sus hinchas se volvieron con las manos vacías a Brasil. Si llegan a tiempo para meter sus votos en las urnas, los espera otra final: Lula vs. Bolsonaro. n

Portada

es-ar

2022-10-02T07:00:00.0000000Z

2022-10-02T07:00:00.0000000Z

https://kioscoperfil.pressreader.com/article/282011856244135

Editorial Perfil