El candidato cerebral

… de Cherniak tiene un recorrido. Primero fue el presidente Alberto Fernández, quien en su paso por Roma durante su última gira europea no incluyó actividades con la cúpula del organismo que encabeza el chino

Qu Dongyu, pese a las declamaciones públicas de la prioridad que es la lucha contra el hambre para el Gobierno. Vale aclarar que las reuniones con la FAO y el presente gobierno fue de las primeras que tuvo en el plano internacional. De hecho fue Fabiola Yáñez

la “embajadora” a poco de asumir la Presidencia Fernández y es ella quien con las “primeras damas” sigue un programa de la FAO junto con sus pares de América Latina. Luego fue el canciller Felipe Solá quien, en casi una semana en suelo italiano, ni siquiera preguntó por la posibilidad de encontrar a Dongyu. Dos gestos que en la hipersensible diplomacia algunos decodifican como una pérdida de confianza en el radical Cherniak. La paranoia y llamados que suelen potenciarla, pintan un escenario que ubican al diplomático en una situación de creer que pagando –recién ahora– el precio de haber sido uno de los designados entre gallos y medianoche cuando el macrismo decía “chau, chau, chau” a la Presidencia en 2019. Cherniak es, por ahora, el único de los diplomáticos enviados por el cada vez más deslucido ex canciller Jorge Faurie.

Tiempos preelectorales – incluso de medio término como el presente–, celos profesionales, y demás condimentos que hacen que la política a veces parezca un vodevil, ubican el nombre “Cherniak” en boca de quienes aceleran comentarios de radiopasillo, como si fueran la verdad revelada. Hay un motivo: hay cargos que para muchos son “premios consuelo”, como por ejemplo el que le dieron a Marcela Losardo al mandarla a la Unesco ante su tranquilidad diletante respecto a la reforma judicial. Para algunos, el de la FAO también entra en esa categoría.

FACTOR STOLBIZER

Ella tiene la “mancha Massa”. Así hablan de Margarita Stolbizer parte de Juntos por el Cambio para subestimar que la ex diputada se sume al armado de Facundo Manes. El pase de facturas es por su alianza en el pasado con Sergio Massa, que ya quedó atrás. De hecho, no es uniforme esta opinión en todo el espectro PRO, ya que el partido GEN liderado por Stolbizer se sumó a la lista impulsada por Horacio Rodríguez Larreta y liderada por María Eugenia Vidal. La rosca electoral todo lo puede.

CHICANA ‘PURISTA’

“¿Buscan rearmar la UCR y suman dos peronistas?”. Esta frase se escucha como chicana contra Facundo Manes de boca de quienes están en el mismo equipo aunque al cruzar la General Paz, son competencia. Y eso fue cuando Emilio Monzó y Joaquín De la Torre fueron incorporados al armado del neurocientífico. Sí, Monzó y De la Torre tienen ese adn peronista.