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Tragedia contemporánea

GONZALO SANTOS

Lo oscuro que hay en mí

Autor: Horacio Convertini Género: novela Otras obras del autor: New Pompey; El último milagro; La soledad del mal; Los que duermen en el polvo Editorial: Alfaguara, $ 1.499

Si las dos novelas anteriores del periodista y escritor Horacio Convertini incorporan al género negro elementos de la ciencia ficción, esta nueva novela pareciera hundir sus raíces en la tragedia griega, y esto se advierte desde el principio. Ya en el epígrafe hay una cita de Borges que refiere a su típico momento de anagnórisis (“cualquier destino, por largo y complicado que sea, consta en realidad de un solo momento: el momento en que el hombre sabe para siempre quién es”), y además la primera escena se puede leer como una prolepsis o flash forward que anuncia que las cosas van a terminar mal –o con sangre, al menos–, de modo que la atención va a estar centrada en el proceso que desembocará en ese desenlace.

El personaje principal, Luis, es un empleado municipal cuya vida transcurre entre distintas rutinas –la de su trabajo, la conyugal–, hasta que un día el destino le habilita un punto de fuga. En el departamento que alquilaba su padre, el Gringo Daverza –muerto días atrás– encuentra una valija con cien mil dólares y, unos días después, descubre que en el baúl del Taunus donde fue hallado sin vida había un objeto absolutamente incompatible con el tipo de vida de su progenitor. El hallazgo le resulta inexplicable. ¿Cómo es que un simple viajante de comercio tenía esa cosas? ¿Qué le había estado ocultando? ¿Quién era, en realidad, su padre? Luis decide seguir sus rastros hasta una whiskería en Médanos.

En ese tugurio encontrará su anagnórisis, pero la revelación de la verdad no lo destruye, sino todo lo contrario. A diferencia de los clásicos griegos, en la tragedia que construye Convertini hay errores, pero no hamartía porque lo que podría ser un error, en todo caso, se vive como un acierto. La transgresión realiza. El margen de la ley es un espacio que augura un futuro prometedor. Tampoco hay una catarsis, en el sentido aristotélico. Ningún lector podría redimirse.

Ni purgar sus bajos instintos. Probablemente una tragedia a la argentina no podría darse de otro modo.

Luis entra a la clandestinidad para salvar aquello que ama y, en ese sentido, termina repitiendo los pasos de sus padre. Virginia, su esposa, acaba de abandonar su casa y él quiere recuperarla. En cierto modo la situación es paradójica: en el momento en que por fin encuentra el lado B del padre –y el suyo propio, casi por añadidura–, pierde el lado A de su mujer, cuyas motivaciones le empiezan a resultar inescrutables. Resuelve un enigma y se tropieza con otro. Así, Lo oscuro que hay en mí es un policial de enigmas, pero de enigmas ontológicos y existenciales.

A través de capítulos cortos y de una prosa lacónica y precisa que todo el tiempo está yendo al hueso y logra generar tensión incluso en las escenas más triviales, Horacio Convertini construye personajes que, como en las novelas del escritor francés David Goodis, buscan un sentido, pero también, como en las de Arlt, un golpe de suerte que les permita abandonar una vida miserable.

Construye personajes que, como en las novelas de Goodis, buscan un sentido, pero también, como en las de Arlt, un golpe de suerte que les permita abandonar una vida miserable.

CULTURA

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2021-09-19T07:00:00.0000000Z

2021-09-19T07:00:00.0000000Z

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