Un subsidio de 1.350 millones de dólares

Las necesidades de cumplir como sea el Acuerdo con el FMI, llevó al gobierno nacional y popular de Alberto, Cristina y Massa a subsidiar por 1.350 millones de dólares a los exportadores del sector más productivo de Argentina. La oligarquía, tal cual lo definen ellos mismos.

En un país donde la gran mayoría de los trabajadores (registrados y no registrados) y los jubilados no llegan a fin de mes, nos damos el lujo de subsidiar a los exportadores de soja.

Sin embargo, el subsidio no termina allí, ya que el Gobierno se ha reservado unos 650 millones de dólares que se recaudarían en concepto de retenciones, para llevar adelante políticas de promoción económica.

Por lo tanto, el subsidio que pagaremos los argentinos ronda los 2 mil millones de dólares (casi medio punto de PBI).

Ahora bien, ¿cómo se paga el subsidio?

Según Resolución 621/2022 del ministro de Economía de la Nación, publicada hoy en el Boletín Oficial, se dispone a emitir una letra en dólares a 10 años de plazo (un “pagadios”) para entregarle al Banco Central de la República Argentina (BCRA), a cambio de los pesos equivalentes al subsidio. Estamos hablando de una emisión de 287.500 millones de pesos, dentro de un país que tiene una expectativa de inflación anual de 100%. Más nafta al fuego.

El tema es que ya lo hicieron y el ministro Massa dispondrá de 650 millones de dólares para promover la economía.

Antes de seguir queremos dejar en claro que esta columna no es contra los exportadores de soja, ni en contra de nadie. Solamente, es para echar un poco de luz a la sociedad sobre las consecuencias de las recientes medidas económicas.

La idea es poner en la agenda pública la oportunidad de promover las alicaídas economías regionales, que han perdido competitividad por el atraso cambiario, antes que el dinero recaudado sea direccionado a financiar a otros sectores, ubicados en los lugares más poblados del país, en búsqueda de una mayor adhesión política y sostenerse en el poder.

Si el gobierno nacional decide destinar los 650 millones de dólares recaudados en conceptos de retenciones a quitar las retenciones a las exportaciones de todas las economías regionales del país, por el plazo de un año, le sobraría dinero.

Cuando hablamos de exportaciones de las economías regionales, estamos hablando de productos primarios y de manufacturas de origen agropecuarios, por ejemplo: la industria de la pesca, la industria vitivinícola, la industria del azúcar y la yerba mate, la fruticultura, la horticultura, entre otras.

Sólo para citar un caso emblemático para Mendoza y el resto de las provincias vitivinícolas, las exportaciones de vinos y mostos tributan, en concepto de retenciones, unos 45 millones de dólares por año. Es decir, sólo un 7% de lo que dispondrá Massa.

Entendemos que es de vital importancia lograr que el gobierno nacional direccione correcta e inteligentemente estos fondos que pagaremos con más inflación en el corto plazo y con menor disponibilidad presupuestaria dentro de 10 años, cuando haya que pagarle la letra al BCRA.

Donde la mayoría no llegan a fin de mes, vamos a subsidiar a los exportadores de soja